lunes, 22 de junio de 2009

Buscadores de Ballenas.






Pertenezco ahora al grupo de los buscadores de Ballenas. Nuestro trabajo consiste en recorrer la parte sur del golfo de Califonrnia en una embarcación a motor de 16 metros de eslora.
Nos levantamos bien temprano en la mañana, antes del amanecer, lo que significa que todos los días empiezan con el espectáculo del sol elevandose en el horizonte en una danza violácea, rosada y naranja de nubecillas que se dezplazan en el cielo.
Luego de desarmar las carpas, Noel viene a recogernos en la panga (lancha). El reflejo del sol matinal en el agua, los colores de los cerros y la curiosa y peculiar vegetación de un clima tan árido, me hacen olvidar que tengo sueño, que mi bolsa de dormir no es tan cómoda como mi cama.
Nos acostumbramos al mecer del barco y a las olas. Aunque a la noche, ya en la tierra continuamos sinténdolo.
Nos dividimos en pequeños grupos de guardia y mientras unos buscan ballenas, otros juegan, descansan, estudian o se lavan los dientes.
Buscamos a los cetáceos por algún indicio que puedan darnos: algún soplo, q se ve como agua que sube en forma de spray, un lomo, una aleta, una cola, o cualquier otra irregularidad en la superficie del agua.

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